Gratén de patata con espinacas y queso camembert
El gratén de patata o gratinado de patata es uno de mis platos favoritos, vamos como todo lo que lleve patata, no hay alimento más sencillo y económico que nos sirve tanto para hacer un plato fácil o uno de estrella michelin. Aunque quizá esta receta puede parecer más propia de principios de otoño, por el hecho de encender el horno, yo la preparo todo el año (si, soy de las que no dejan descansar el horno ni con 40° a la sombra je je) y me sigue apeteciendo en estas fechas ya primaverales. Sea cuando sea que la prepares te vas a chupar los dedos.
Este gratén de patata es mi versión del «gratin dauphinese«, plato típico de la cocina francesa que en su receta original no incorpora queso ni espinacas, simplemente las patatas horneadas con nata y ajo. Personalmente me gusta más mi versión (faltaria más).
- - 350 g de patata
- - 1 cebolla mediana
- - 200 g de espinacas
- - 1 queso camembert
- - 1 huevo
- - 125 ml de leche
- - aceite de oliva
- - sal
- - pimienta
- Precalienta el horno a 180°.
- Pela la cebolla y corta en juliana.
- En una sartén con un para de cucharadas de aceite, pocha la cebolla a fuego bajo hasta que esté blandita.
- Añade las patatas peladas y cortadas en rodajas finas, remueve para mezclar con la cebolla, añade una pizca de sal y cocina a fuego medio-bajo hasta que empiecen a estar tiernas.
- En otra sartén con una cucharada de aceite, salte las espinacas un par de minutos (puedes hacerlo por tandas si te ocupan mucho).
- En una fuente de horno o en cazuelitas individuales coloca una primera capa de espinacas, otra de patata con cebolla y una de láminas de camembert. Sigue colocando capas (da para dos o tres) hasta acabar con una de camembert.
- Bate el huevo junto con la leche, una pizca de sal, pimienta y vierte por encima de las capas de patata.
- Hornea el graten de patata durante 20-25 minutos.
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