Limonada de sandía y menta, una bebida super refrescante
Pocas bebidas son tan refrescantes en verano como la limonada y si se prepara en casa el éxito está asegurado. Si además le incorporamos fruta fresca de plena temporada como en esta limonada de sandía y menta fresca, disfrutarás de una bebida sin alcohol llena de sabores deliciosos.
Su preparación es tan sencilla como mezclar todos los ingredientes, enfriar en la nevera y lista para sorprender a la familia o los amigos. A mi me gusta utilizar la variedad de sandía sin pepitas, te ahorra el trabajo de retirarlas, pero si no la encuentras no te preocupes, una vez triturada cuela bien para retirar cualquier resto de ellas.
Una de las ventajas de preparar la limonada casera es que puedes modificar la cantidad de azúcar y poner más o menos según tu gusto o según está la fruta de madura. Si lo prefieres, también tienes la opción de utilizar algún edulcorante y hacer una versión más ligera y saludable.
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- 500 g de sandía (sin cáscara ni pepitas)
- 600 ml de agua fría
- 125 ml de zumo de limón
- 50 g de azúcar (más o menos al gusto)
- Menta fresca
- Hielo para servir
- Rodajas de limón para servir
- Tritura la sandía y cuela para que no quede ningún trozo de pulpa.
- Mezcla en una jarra el agua fría con el zumo de limón y el azúcar hasta que este se disuelva. Añade el zumo de la sandía, remueve para mezclar bien.
- Incorpora a la jarra unas hojas de menta fresca y unas rodajas de limón. Deja enfriar o sirve con unos cubitos de hielo.
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